"Mirando las Ruinas con Fe"
Cuando hablamos de "ruinas", nos referimos a los restos de edificios que alguna vez fueron sólidos y funcionales, pero que han quedado en un estado de deterioro debido a la falta de mantenimiento, desastres naturales, conflictos o abandono. Este término evoca la idea de decadencia y pérdida.
En este contexto, quiero compartir dos aspectos importantes que encontramos en la Biblia en relación con las ruinas. En primer lugar, recordemos los muros de Jerusalén, que permanecieron en ruinas durante aproximadamente un siglo, finalmente fueron reconstruidos en tan solo 52 días.
Esta prolongada decadencia nos invita a reflexionar sobre cuánto tiempo a veces toleramos una situación adversa antes de tomar medidas, como sucedió cuando Nehemías asumió la responsabilidad de restaurarlos.
En segundo lugar, el templo también fue destruido y quedó en ruinas, como se describe en el Salmo 74:3, que dice: "Ven a ver tu templo: para siempre ha quedado en ruinas; todo lo destruyó el enemigo."
En el Libro de Hageo, vemos cómo Dios observa esas ruinas y se comunica con el profeta para transmitir una palabra de fe y esperanza.
Por lo tanto, es esencial que mires esas ruinas con fe, porque si las contemplas con dolor, te mantendrás anclado en el pasado y experimentarás un sufrimiento constante.
En el Capítulo 2:3,(Hageo) Dios pregunta si todavía hay quienes recuerden el templo en su esplendor anterior y cómo lo ven ahora. Esta pregunta nos lleva a considerar cómo nos sentiríamos al mirar las áreas de nuestras vidas que están en ruinas.
Hoy quiero, que dejes de mirar con dolor lo que fue y ya no es, y en su lugar, mires con ojos de fe y esperanza. Es posible que lo que amabas se haya desmoronado, solo queden recuerdos y algunas fotografías, que hacen que tus lágrimas recorran tu por rostro.
La empresa o negocio que tuviste con gran esplendor, o aquel matrimonio que muchos admiraban y fue destruido por la infidelidad, o simplemente te abandonaron, quizás sea tu salud la que consideras que está en ruinas...
Pero Dejame decirte: ¡Dios está contigo y te dará la fuerza para reconstruir tu vida! Puede que la reconstrucción no sea como la esperabas, pero será de la manera que solo Él sabe hacerlo.
Por esta razón, te invito a mirar las ruinas con fe y esperanza.
También te animo a explorar mi libro digital "52 días de reconstrucción", donde podrás comprender más a fondo lo que estás experimentando y seguir una guía práctica durante 52 días que te ayudará a desarrollar habilidades y encontrar la fuerza interior que necesitas.
Nehemías nos brinda importantes lecciones de resiliencia, fe, fortaleza y ánimo para este proceso de reconstrucción.
